Esta actividad es el resultado de un trabajo colaborativo que se ha realizado entre organizaciones de la sociedad civil.

En la actualidad, Chile cuenta con más del 40% de energías renovables en su matriz eléctrica, superando los 14 GW de capacidad instalada, principalmente energía solar y eólica. A pesar de este avance, es relevante destacar que solo un poco más de 200 MW corresponden a generación distribuida bajo la modalidad de net billing, y la participación en proyectos de propiedad conjunta es inferior a 200 kW.

Con el horizonte del 2050 en mente, donde se proyecta que un 70% de los departamentos en Chile y el 57% de las viviendas deberían contar con  calefacción eléctrica y que la mayoría de los consumidores no sabe cuánta energía eléctrica consume, ni tampoco conoce el detalle de su cuenta eléctrica cada mes, es esencial incluir a la ciudadanía como un actor indispensable dentro del sector energía.

A partir de los datos mencionados y de la actual política pública existente y discusión legislativa sobre el proyecto de ley de transición energética e impulso de energías renovables en Chile, es que se ha creado el grupo de acción por la energía ciudadana (GAPEC), conformado por diferentes organizaciones de la sociedad civil y cuyo rol es posicionar a la ciudadanía en la opinión pública como un actor indispensable de la actual transición energética hacia la democratización y el impulso de las energías renovables, promoviendo para esto la discusión y propuestas de políticas públicas.

Para avanzar en la discusión e intercambiar conocimiento sobre la importancia de la energía ciudadana y cuáles son los desafíos y obstáculos que hay en materia legislativa, regulación energética y aspectos técnicos que se deben abordar para avanzar hacia un marco legal del sector que se adapte a los nuevos tiempos, se desarrolló el segundo encuentro de energía ciudadana.

La jornada contó con la intervención de Sara Larraín, directora ejecutiva de Chile Sustentable, quien abordó el “Estado actual de la legislación eléctrica: Proyecto de Ley de impulso a las renovables y Proyecto de Ley de Transición Energética”. Destacó principalmente los mecanismos habilitantes que crea este proyecto y el aumento en las metas obligatorias de generación de ERNC de gran escala desde 20% al 2025 a 60% al 2030 que incluye el proyecto de impulso a las renovables. Sobre este último, destacó además que “consideramos muy positivo el incremento de 300 kW a 500 kW de la generación posible de inyectar al sistema eléctrico en el marco de la Ley de Net Billing o generación distribuida”

Por su parte, Carla Douglas, coordinadora de Proyectos de Energía Colectiva, hizo una presentación de resultados de entrevistas a expertos(as) y focus group del proyecto: “Estudio de fomento para la elaboración de políticas públicas de fomento de la Energía Ciudadana en Chile”. 

Los resultados arrojan que en la experiencia internacional los proyectos cooperativos de energía tienen un respaldo normativo importante. “Hemos recogido aprendizajes de cuáles requerimientos técnicos se pueden desarrollar para tener un marco normativo. En las entrevistas de Chile hay interés del gremio y desarrolladores de proyectos y beneficiarios en que la ciudadanía tenga un rol más activo en la transición energética”.

Agregó que “hay un consenso en que el gobierno debe promover políticas públicas para asegurar que los beneficios de las energías renovables lleguen a las personas y la comunidad tenga las capacidades para gestionar su propia energía. Estamos generando propuestas de política pública para que en conjunto podamos desarrollar el marco legislativo necesario para su promoción”, dijo.

Así también Javier Piedra, director ejecutivo de la Fundación Energía para Todos realizó un análisis de las alzas tarifarias del sector eléctrico y afirmó que la cuenta de la luz es muy importante para las familias, por lo tanto, es importante evaluar de qué forma se puede reducir su costo y así mejorar la calidad de vida de las personas, teniendo entonces impacto social. “En términos del cuidado del medio ambiente también es relevante porque entre más energías renovables hay, menos contaminación tiene, y tercero, tiene que ver con un aspecto técnico, ya que sólo en Chile hay un modelo donde hay energía en un lugar y se consume en otro. Entonces se genera vertimiento y saturación de líneas. La solución técnica para resolver el problema de generación de energía es que los mismos ciudadanos generen energía en las ciudades. Además, creemos que a través del cooperativismo se generan beneficios sociales y más confianza entre las personas y eso permite que puedan tener otras iniciativas”, afirmó.

El Presidente de Energía Colectiva, Cristian Mires, señaló que “en el marco del estudio desarrollado por nuestra ONG con apoyo de la Fundación Boll, entrevistamos a expertos y expertas nacionales e internacionales para conocer el mundo de las cooperativas y comunidades energéticasenergías colectivas de España, Colombia, Brasil y los casos de Chile. Para nosotros es importante intercambiar este conocimiento para aportar desde esta articulación de la sociedad civil a crear una legislación acorde con lo que se necesita en Chile”, concluyó. Dentro de los próximos pasos del GAPEC, será la finalización y entrega a autoridades y parlamentarios/as del documento “Propuestas para el fomento de la Energía Ciudadana en Chile”, con el objetivo de incidir en la política pública con propuestas concretas que apoyen la realización de proyectos liderados por la ciudadanía.